LinkedIn: lo que nunca debes hacer en la red profesional

Aprovechar LinkedIn implica evitar trampas comunes que dañan tu reputación o restringen tu cuenta. Descubre qué acciones, más allá de las reglas explícitas, pueden frenar tu progreso y minar tu credibilidad profesional.

LinkedIn se ha consolidado como la principal plataforma para construir una marca personal, ampliar redes de contacto y encontrar oportunidades laborales. Sin embargo, para aprovechar su potencial, es crucial entender que se rige por un código de conducta, tanto explícito como implícito. Ignorar estas normas no solo puede dañar tu reputación, sino que también podría acarrear la suspensión de tu cuenta.

Comprender qué acciones evitar es tan importante como saber qué estrategias implementar. Desde el contenido que compartes hasta la forma en que interactúas con otros, cada paso en LinkedIn contribuye a tu imagen profesional. A continuación, se detallan las prácticas que debes evitar para mantener un perfil sólido y respetado en la plataforma.

Acciones prohibidas que pueden restringir tu cuenta

LinkedIn cuenta con unas Políticas de la Comunidad Profesional claras para garantizar un entorno seguro y profesional. La violación de estas reglas puede llevar a la eliminación de contenido, advertencias o incluso la restricción permanente de la cuenta.

1. Crear perfiles con información falsa

La autenticidad es un pilar fundamental en LinkedIn. Está estrictamente prohibido crear perfiles con nombres falsos, suplantar la identidad de otra persona o mentir sobre tu experiencia laboral, formación o aptitudes. Proporcionar datos incorrectos no solo viola las políticas de la plataforma, sino que también destruye tu credibilidad profesional si se descubre.

2. Usar herramientas de automatización no autorizadas

El uso de software de terceros para automatizar acciones como el envío masivo de invitaciones, mensajes o la extracción de datos de perfiles está prohibido. LinkedIn busca fomentar conexiones genuinas y considera estas prácticas como spam. Su algoritmo está diseñado para detectar actividad sospechosa, como un número inusualmente alto de visitas a perfiles, lo que puede resultar en una suspensión temporal o permanente.

3. Publicar contenido inapropiado

LinkedIn es una red profesional, y el contenido debe reflejar ese contexto. Se prohíbe explícitamente la publicación de:

  • Contenido de odio o violento: Discursos que ataquen a personas por su raza, etnia, religión, género u orientación sexual.
  • Acoso o intimidación: Comportamientos que degraden, avergüencen o abusen de otros miembros.
  • Contenido sexualmente explícito: Imágenes, videos o textos de naturaleza pornográfica o que busquen la explotación sexual.
  • Desinformación y noticias falsas: Compartir contenido engañoso o falso que pueda perjudicar a individuos, empresas o la sociedad.

Malas prácticas que dañan tu imagen profesional

Más allá de las prohibiciones oficiales, existen una serie de «reglas no escritas» cuyo incumplimiento puede afectar negativamente tu marca personal y la efectividad de tu networking.

1. Tener un perfil incompleto o descuidado

Un perfil a medio completar transmite falta de interés y profesionalismo. Es uno de los errores más comunes y graves. Asegúrate de que cada sección esté optimizada:

  • Foto de perfil no profesional: Evita selfies, fotos de vacaciones o imágenes de baja calidad. Opta por un retrato de alta resolución donde se te vea claramente y con un aspecto profesional.
  • Titular genérico: No te limites a poner «En búsqueda activa de empleo». Utiliza ese espacio para describir tu especialidad, tu propuesta de valor o las palabras clave por las que quieres que te encuentren.
  • URL personalizada: No dejes la URL genérica que LinkedIn asigna por defecto. Personalízala con tu nombre y apellido para que sea más fácil de recordar y compartir.
Mano profesional sacando bloque de Jenga con logo de LinkedIn en oficina moderna

2. Enviar invitaciones genéricas

Conectar con alguien sin un mensaje personalizado es el equivalente a entregar una tarjeta de visita sin decir una palabra. Tómate un momento para explicar por qué quieres conectar, ya sea porque comparten un interés, trabajan en el mismo sector o admiras su trayectoria. La personalización demuestra un interés genuino y aumenta drásticamente la probabilidad de que acepten tu invitación.

3. Vender de forma agresiva e inmediata

Uno de los errores más irritantes es recibir un mensaje de venta justo después de aceptar una solicitud de conexión. LinkedIn se basa en construir relaciones a mediano y largo plazo. Antes de intentar vender tus productos o servicios, enfócate en aportar valor, interactuar con el contenido de tus contactos y establecer una base de confianza. La regla 80/20 es una buena guía: el 80% de tu actividad debe ser aportar valor y el 20% puede tener un enfoque más comercial.

4. Publicar contenido irrelevante o polémico

Aunque LinkedIn se ha vuelto más conversacional, sigue siendo un espacio profesional. Evita temas que puedan generar controversia innecesaria y alienar a tus contactos.

  • Política y religión: Estos temas son altamente polarizantes. A menos que tu profesión esté directamente relacionada con ellos, es mejor mantenerlos fuera de tu feed.
  • Contenido demasiado personal: Compartir lo mismo que en Facebook o Instagram es un error. Las fotos de tus vacaciones, mascotas o memes no suelen tener cabida en un entorno profesional.
  • Quejas sobre trabajos o jefes: Nunca critiques a tu empresa actual o anterior en público. Esta práctica es poco profesional y puede ser vista como una señal de alerta por futuros empleadores.

5. Descuidar la interacción con tu red

Estar en LinkedIn no es solo publicar, sino también interactuar. No responder a los comentarios en tus publicaciones o a los mensajes directos da una mala impresión. Del mismo modo, no interactuar con el contenido de otros te hace invisible. Dedica tiempo a comentar, recomendar y compartir publicaciones relevantes de tu red para construir relaciones sólidas.

6. Pedir recomendaciones a desconocidos

Las recomendaciones son una herramienta poderosa para validar tus aptitudes, pero solo si provienen de personas que realmente han trabajado contigo. Pedir recomendaciones a contactos que apenas te conocen devalúa su propósito y puede resultar incómodo para la otra persona. Para fortalecer tu perfil, puedes aprender a validar tus aptitudes en LinkedIn pidiendo que te respalden de la manera correcta.

En resumen, el éxito en LinkedIn depende de entender su cultura. Evitando estas prácticas prohibidas y errores comunes, no solo mantendrás tu cuenta segura, sino que también construirás una reputación profesional sólida que te abrirá puertas a nuevas oportunidades.